LA NECESIDAD DE COMER.
Comer es una necesidad biológica. Los alimentos nos proporcionan recursos materiales y energéticos que permiten mantener la vida, crecer y recuperar pérdidas, realizar movimientos y cualquier trabajo físico y mental.
Es a la vez una respuesta a la necesidad de saciar el apetito y satisfacer el buen gusto por los alimentos. La combinación de ambos factores genera placer. En el acto de comer entran en juego todos los sentidos:
• La vista realiza una primera aprobación de la ingesta tras la observación de los colores, combinación y presentación de los alimentos.
• El olfato es estimulado al percibir el olor de la comida.
• El tacto y el gusto permiten valorar a través de la lengua, los labios y los dientes la textura y sabor de un alimento.
• Finalmente la intervención del oído, agudamente utilizada por la publicidad al anunciar algunos productos alimenticios (patatas fritas) y de gran influencia en niños/as que son consumidores activos de productos que hacen ruido (pipas, ganchitos, garbanzos fritos, maíz tostado, etc.) juntamente con la intervención del gusto.
COMER PUEDE SER SÍMBOLO DE DESIGUALDAD SOCIAL.
El avance de la producción de alimentos comporta la aparición de profundas desigualdades sociales entre los que poseen alimentos y los que no los tienen.
Por ese motivo se ha establecido el concepto de alimentación suficiente, entendiendo por ésto la cantidad mínima de alimentos que toda persona necesita diariamente para sobrevivir.
Esta cantidad se ha fijado en 2700/2800 calorías y unos 40 g de proteínas animales. Estas cifras son solo indicativas ya que el número de calorías necesarias, depende de la edad, el clima, el tipo de trabajo que realiza una persona, etc...
En la actualidad se puede cifrar en 500 millones de personas que sufren hambre crónica en el mundo, y unas 100.000 muertes diarias.
La mitad de la población tiene problemas de malnutrición, mientras que la otra mitad sufre un exceso de alimentación y tiene enfermedades por ese motivo.
La tierra produce alimento suficiente para toda la población mundial, si no hay para todos es debido a la desigualdad e injusta distribución. El 30% más rico de la población mundial dispone del 75% de la producción alimentaria, el 70% más pobre de la población mundial sólo dispone del 25% de la producción. Incluso los animales domésticos que poseen los habitantes de los países ricos, comen más que las personas de los países pobres.
El hambre es el resultado de:
• El reparto injusto e inadecuado de la tierra cultivable
• Las decisiones gubernamentales que conceden libertad de acción a los grandes propietarios privados y a las compañias multinacionales.
• El éxodo rural hacia la ciudad.
• Los vicios alimentarios y consumistas provocados por la occidentalización.
• La escasa diversificación de la producción, con la consiguiente dependencia de solamente uno o dos productos.
• Las alteraciones, con frecuencia provocadas, en el mercado internacional de cereales.
• La elevada tasa de paro y subocupación.
• Las desigualdades en la distribución de ingresos.
• La falta de capital para inversiones agrícolas.
• El progresivo endeudamiento exterior de la economía nacional.
• La brusca transición de la agricultura de subsistencia a la industria, que ha ocasionado el agotamiento de muchas tierras.
El hambre y la malnutrición tienen importantes consecuencias para el normal desarrollo de las personas que los sufren. El malestar físico, la miseria, la reducción de la capacidad de trabajo, las enfermedades y el desarrollo físico y mental, son algunas de las consecuencias de la falta de alimentación suficiente.
¿Sabe cómo se llaman los alimentos en español?
Las actividades ...
Actividedes de vocabulario del CVC del Instituto Cervantes
¿Dónde se compra?
En la tienda de alimentación
Canción: Para crecer debemos comer
Congreso Mundial de Profesores de Español
El Instituto Cervantes, con motivo de su 20.º aniversario, convoca el Congreso Mundial de Profesores de Español, que se celebrará los días 21 y 22 de noviembre de 2011. http://comprofes.es/inicio