miércoles, 21 de diciembre de 2011

Mensaje de Navidad


A todos...



Carta del Amigo Invisible


Boa Vista, 16 de Diciembre de 2011.

Amiga Jaci,
Fue un placer conocerte y está contigo durante cerca de dos años durante el curso de 2ª Licenciatura de Español por el Pafor. Hicimos desde el principio trabajo juntas, conversamos, echamos broma, convivimos. Quizás durante este tiempo no tengamos aprovechado al máximo las oportunidades que la vida nos brinda de conocer las personas que se acercan de nosotros debido a nuestra rutina “caótica” y quizás muchas veces nos hemos sentido alejadas, pero te dejo un mensaje que me gusta mucho y que habla del verdadero sentido de una amistad. Espero que te guste y que siempre que se sentir sola y alejada pueda acordarte de este mensaje.



El Árbol de la Amistad
Existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino.
Algunas recorren el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar, más otras apenas vemos entre un paso y otro.
A todas las llamamos amigos y hay muchas clases de ellos.

Tal vez cada hoja de un árbol caracteriza uno de nuestros amigos.
El primero que nace del brote es nuestro amigo papá y nuestra amiga mamá, que nos muestra lo que es la vida.
Después vienen los amigos hermanos, con quienes dividimos nuestro espacio para que puedan florecer como nosotros.

Pasamos a conocer a toda la familia de hojas a quienes respetamos y deseamos el bien.
Mas el destino nos presenta a otros amigos, los cuales no sabíamos que irían a cruzarse en nuestro camino.
A muchos de ellos los denominamos amigos del alma, de corazón.
Son sinceros, son verdaderos.
Saben cuándo no estamos bien, saben lo que nos hace feliz.

Y a veces uno de esos amigos del alma estalla en nuestro corazón y entonces es llamado un amigo enamorado.
Ese da brillo a nuestros ojos, música a nuestros labios, saltos a nuestros pies.

Más también hay de aquellos amigos por un tiempo, tal vez unas vacaciones o unos días o unas horas.
Ellos acostumbran a colocar muchas sonrisas en nuestro rostro, durante el tiempo que estamos cerca.

Hablando de cerca, no podemos olvidar a amigos distantes, aquellos que están en la punta de las ramas y que cuando el viento sopla siempre aparecen entre una hoja y otra.
El tiempo pasa, el verano se va, el otoño se aproxima y perdemos algunas de nuestras hojas, algunas nacen en otro verano y otras permanecen por muchas estaciones.
Pero lo que nos deja más felices es que las que cayeron continúan cerca, alimentando nuestra raíz con alegría.
Son recuerdos de momentos maravillosos de cuando se cruzaron en nuestro camino.

Te deseo, hoja de mi árbol, paz, amor, salud, suerte y prosperidad.
Simplemente porque cada persona que pasa en nuestra vida es única.
Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros.

Habrá los que se llevarán mucho, pero no habrán de los que no nos dejarán nada.
Esta es la mayor responsabilidad de nuestra vida y la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad.




Obs: Espero que te guste este pequeño regalito para poner una foto espectacular de tu viaje a Punta Cana.




De su amiga hoy y siempre Márcia Andréia

Reflexión...



 
Recuerda Que...


Hay tristezas que son como el cauce de los ríos, se deslizan suaves y bajan por tu vida sin detenerse ante los obstáculos, para luego desembocar en las playas de tu futura alegría.
 Cuando notas que tu mirada pierde el brillo como el atardecer, recuerda que al llegar la mañana, el sol hará que tu hoy sea el inicio de algo totalmente nuevo. Espera el mañana con la cabeza bien erguida.
 Continúa simpatizando con la vida aun cuando el sol no brille.
 Todos los sinsabores que pudiste percibir en la vida, tienen como finalidad que recuerdes que aún te queda el sentido del gusto para diferenciar lo bueno de lo malo.
 Sólo se vive un día a la vez, por eso, por mucha prisa que tengas tendrás que esperar 24 horas para ver el mañana.
 ¡¡Cuánto amor hay en el cielo para ti!!
 La vida es un lujo, es el gusto de lo exquisito por mantener un pie frente al otro. Sí, la vida es un lujo; lujo para amar, para respirar, para soñar y para ser feliz. Por eso no te la guardes sólo para ti, gástala como si fueras millonario.
 Que tu sonrisa sea parecida a la de los niños cuando se saben amados, y que logres ver en este día que naciste para recibir una caricia en cada uno de tus latidos, que te des el gusto de perfumar tu boca con palabras llenas del aroma de tu interior, y que la paz que rodea el paternal corazón de Dios sea la que te mantenga saturado de tranquilidad en este tu único día que te corresponde vivir hoy.
 “Estar vivo es uno de los regalos más hermosos que podrás mantener tanto en tu espíritu como en tu alma. Por eso, manifiesta tu viveza en todo lo que haces, ríe como si fuera la última vez, sueña como los niños y haz de ti un ser que vive para hacer feliz a los demás”


 
 

Receta de Felicidad


            Receta de la felicidad


Ingredientes:

1 Kilogramo de recuerdos infantiles.
2 Tazas de sonrisas.
2.5 Kilogramos de esperanza.
100 Gramos de ternura.
5 Latas de cariño.
40 Paquetes de alegría.
1 Pizca de locura.
8 Kilogramos de amor.
5 Kilogramos de paciencia.

Modo de Preparación:

1) Limpia los recuerdos, quitándoles las partes que estén echadas a perder o que no sirvan. Agrégale una a una las sonrisas, hasta formar una pasta suave y dulce.

2) Ahora, añade las esperanzas y permite que repose, hasta que doble su tamaño.

3) Lava con agua cada uno de los paquetes de alegría, pártelos en pequeños pedacitos y mezcla con todo el cariño que encuentres.

4) Aparte, incorpora la paciencia, la pizca de locura y la ternura cernida.

5) Divide en porciones iguales todo el amor y cúbrelos con la mezcla anterior.

6) Hornéalas durante toda tu vida en el horno de tu corazón.

7) Disfrútalas siempre con tu familia... con el sabor de lo nuestro.


Consejo: Puedes agregar a la mezcla anterior dos cucharadas de comprensión y 300 gramos de comunicación, para que esta receta te dure para siempre.

¡Venezuela aquí Vamos!


Parte VII
El Regreso a Brasil

El viaje de vuelta a Brasil fue muy “divertida” llegamos a Puerto la Cruz a las 15:00 de la tarde y el autobús directo para Brasil había salido a las 14:30. De esta manera empezamos a hacer conjeturas porque no podíamos nos quedar por la noche en una ciudad tan peligrosa.
Salimos en el autobús de las 18:00 que salió a las 19:30….



Llegamos a Puerto Ordaz a la 1:00 de la mañana...






Y nos quedamos en el terminal de guaguas para coger el autobús que venía de Caracas a las 3:00, pero el cambio el camino directo a San Féliz….
 De esta manera cogimos un taxi que nos llevó a San Féliz, para luego descubrimos que el autobús para Brasil sólo iba salir a las 23:00 h.
Decidimos coger un auto pequeño porque queríamos llegar luego a nuestro país….

  





Cuando vimos el autobús no podíamos creer…pequeño, sin baño y tampoco aire acondicionado, además había mas gente que espacio, así mismo seguimos viaje y creo yo que esta aventura tan temprano no se va repetir en nuestra vida.



A las 21:00 llegamos a la frontera y llegamos finalmente a Brasil.